Cómo podemos librarnos de los demonios?
La lucha no es carnal, sino espiritual, y si no nos fortalecemos los demonios seguirán teniendo parte en la vida de los hijos de Cristo, así que debemos ponernos la armadura de Cristo para alcanzar la victoria que tanto anhelamos. Debemos entender que se trata de una guerra espiritual donde nosotros somos los guerreros que derrotaremos a las huestes de maldad. Por lo cual debemos primeramente revestirnos del Espíritu santo para estar preparados realmente. Tenemos que solicitar al Dios Todopoderoso para que nos permita ser bendecidos con la presencia del Espíritu Santo, de esta manera estaremos protegidos de los demonios que quieren amedrentar a los hijos de Dios. Así que cuando permitimos que Cristo permanezca en nosotros, estamos creando un hombre nuevo, destruyendo al viejo hombre donde este demonio habitaba y construyendo al nuevo hombre en Cristo Jesús para que no pueda entrar otra vez esta hueste maligna. Como hemos señalado con anterioridad, todos podemos ser