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Mostrando entradas de febrero, 2019

Dejando su Huella A Través de la Tutoría, Parte 2

En la edición de la semana pasada del «Maná del Lunes», presenté la idea de hacer una diferencia, dejar su marca en el mundo, a través de un enfoque altamente relacional y de beneficio mutuo para la tutoría. Esta semana concluyo esta discusión, citando principios adicionales que David A. Stoddard y yo desarrollamos en nuestro libro: The Heart of Mentoring : Ten Proven Principles for Developing People to Their Fullest Potential [ El Corazón del Mentor: Diez principios comprobados para desarrollar en todo su Potencial a las Personas]. Como mencioné, esto difiere del enfoque típico de la mentoría en el que dos personas son asignadas para interactuar entre sí, les guste o no. En nuestra opinión, la mejor mentoría involucra a un mentor más experimentado que trabaja con un «socio mentor», ambos aprendiendo el uno del otro. Aquí expongo algunos otros principios básicos para este enfoque, juntamente a los fundamentos bíblicos de apoyo: La tutoría efectiva implica la construcción del car

Dejando su Huella A Través de la Tutoría, Parte 1

«Quiero hacer la diferencia». ¿Alguna vez ha dicho esto? Es un pensamiento que muchos de nosotros hemos expresado, ya sea en público o al menos a nosotros mismos. Si usted es un miembro de la generación Baby Boom ya al final de su carrera, o un Millenial que acaba de empezar en su trabajo, ese es un deseo que muchos compartimos. La pregunta es, ¿cómo hacemos esa diferencia? ¿Cómo podemos tener éxito en dejar una marca que perdure mucho después de que hayan terminado nuestros días de laborales? Hay muchas sugerencias posibles, pero hay una que recomendaría altamente: el discipulado. Sé que podría tener una objeción, diciendo algo como: «Tuve un mentor una vez, ¡y fue una experiencia terrible!». Ese no es el tipo de tutela de la que estoy hablando. Muchos de nosotros hemos tenido alguna mala experiencia cuando se nos asignó un mentor que no tuvo un interés genuino en nosotros y consideramos que ser un mentor es una tarea impuesta. No, el tipo de mentoría al que me refiero implica

Tiempo de Re-Plantarnos, ¿Profesional o Personalmente?

Cultivar plantas saludables no siempre es un trabajo sencillo. Mala floración, suelo que se seca rápidamente, las hojas y tallos atrofiados, e incluso las hojas caídas son signos de angustia. Las plantas dan estas señales porque no pueden extraer suficientes nutrientes y humedad a través de su raíz. A menudo, la solución consiste simplemente en trasplantarlos a una «maceta» nueva, «re-plantarlos» en un entorno diferente que sea más propicio para su salud y su crecimiento en general. Curiosamente, este principio de «replantación» no se aplica tan solo a las plantas, sino también a las personas. Mirando hacia atrás a lo largo de mi vida, he sido arrancado y replantado o «cambiado de maceta» varias veces. Cada vez —para mi ventaja— resultó en algo bueno. Por ejemplo, salir de casa e ir a la universidad siendo un hombre joven fue un importante replantamiento . No es que el viejo ambiente fuera malo; era sólo que la nueva tierra fértil me permitía florecer. Cuando dejé mi trabajo y

La Importancia del Tiempo Perfecto

Muchas veces el enfoque para alcanzar el éxito en los negocios es la mano de obra, el servicio de calidad, la ejecución de una idea novedosa o el liderazgo y dirección efectivos. Esos, en su mayor parte, son factores que podemos manejar. Un factor, sin embargo, que a menudo pasamos por alto es el tiempo . Especialmente, la sincronización perfecta. En su libro, ¿Cuándo ?: La ciencia de encontrar el momento preciso , Daniel H. Pink aborda la importancia de la sincronización, ya que afecta a la productividad y —en última instancia— a nuestro éxito. Un artículo del Wall Street Journal resumió sus hallazgos, señalando las estrategias que Pink sugiere que podemos implementar para mejorar nuestro tiempo en el trabajo a lo largo del día. Su investigación descubrió que somos más inteligentes, más rápidos y más creativos en unos momentos del día que en otros. Al confirmar estas conclusiones, Russell Foster, un neurocientífico, afirma: «El cambio de rendimiento entre el punto más alto y el