Una Carrera Laboral – Tiempo para Muchas Relaciones
Trabajar. A algunas personas les encanta y
no se cansan de él. Muchas podrían considerarse adictas al trabajo. Para otros,
el trabajo es un mal necesario, un medio para poner comida en la mesa, poner un
techo sobre nuestras cabezas y proporcionarnos ropa, pagar facturas y
participar en actividades que traen felicidad. Pero ¿alguna vez has considerado
cómo es una vida de trabajo?
Digamos que llevamos una semana laboral
típica "promedio" de 40 horas. Algunos lectores trabajan muchas más
horas que eso, pero usemos 40 horas como punto de discusión. Esto significa que
trabajaremos aproximadamente 2.000 horas a lo largo de un año natural.
Multiplíquelo por la duración de la vida laboral, digamos 45 años. Eso equivale
a 90.000 horas de trabajo, ya sea que permanezca en una empresa o realice
múltiples cambios de trabajo y carrera. ¡Eso es mucho tiempo!
Una buena pregunta que debemos hacernos es:
"¿Cómo pasaré ese tiempo?" Sobre todo, teniendo en cuenta que muy
pocas personas trabajan de forma aislada. Casi todos trabajamos con otras
personas y por necesidad debemos interactuar con ellas a diario. Lo que nos
lleva a otra pregunta: “¿Cómo debo abordar esas relaciones?”
Se han escrito libros sobre este tema, pero
sería bueno considerar sólo algunas de las muchas cosas que la Biblia tiene que
decir sobre cómo debemos abordar nuestro trabajo, así como las personas con las
que debemos trabajar:
Nuestro trabajo debe dar un ejemplo
positivo. Una forma de trabajar es hacer lo mínimo
necesario: ir a trabajar, pasar el día y volver a casa. Pero ese no es un
ejemplo que otros puedan emular, especialmente aquellos de nosotros que
entendemos que debemos trabajar “como para el Señor” (Colosenses 3:23). Por el
contrario, debemos considerar nuestro trabajo – dondequiera que Dios nos haya
colocado – como un llamado sagrado. “Porque somos obra de Dios, creados en
Cristo Jesús para hacer buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para
que las hiciéramos” (Efesios 2:10).
Nuestro trabajo debe ser
irreprochable. Probablemente todos podamos pensar en
algunas personas que perdieron nuestro respeto en el lugar de trabajo debido a
su inaceptable calidad de trabajo, su comportamiento poco ético y su
incapacidad general para hacer contribuciones valiosas a la productividad de
nuestra organización y al servicio a los clientes, proveedores y sus compañeros
de trabajo. “trabajen con sus manos, tal como los instruimos anteriormente.
Entonces la gente que no es cristiana respetará la manera en que ustedes viven,
y no tendrán que depender de otros.” (1 Tesalonicenses 4:11-12).
Nuestra ética de trabajo
debe ser ejemplar. La diligencia y excelencia en el trabajo
que hacemos dice mucho sobre nuestro carácter, compromiso con los demás y, lo
más importante, nuestra determinación de servir como “embajadores de Cristo” (2
Corintios 5:20). Cada vez más, parece que la gente no se enorgullece de su
trabajo, como ha sido la experiencia de las empresas que luchan por encontrar
personas dispuestas a trabajar. Si se presentan a trabajar, muchos parecen
distraerse fácilmente en lugar de concentrarse en sus responsabilidades.
“Pónganse como objetivo vivir una vida tranquila, ocúpense de sus propios
asuntos.” (1 Tesalonicenses 4:11).
Nuestro trabajo debe reflejar preocupación
por los demás. Mientras cumplimos con nuestras
asignaciones y responsabilidades laborales, el lugar de trabajo también puede servir
como plataforma para reflejar a los demás el amor de Jesucristo, demostrando
que nos preocupamos por ellos y sus necesidades. Si sentimos que un compañero
de trabajo o un cliente está pasando apuros, esa puede ser una oportunidad para
mostrar la preocupación y la compasión de Dios. “Ama a tu prójimo como a ti
mismo” (Marcos 12:31).
Por Robert J. Tamasy - MANÁ DEL LUNES es una edición semanal de CBMC INTERNATIONAL, una organización evangélica sin objetivos de ganancia, ni filiación denominacional, fundada en 1930, con el propósito de presentar Jesucristo como Señor y Salvador en la comunidad de negocios e profesional. También disponible en Inglés, Alemán,, Japonés y Portugués. © 2024 DERECHOS RESERVADOS PARA CBMC BRASIL.
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