Oración cuando pasamos por pruebas

Señor, no sé cuál será el resultado de esta difícil circunstancia, ¡pero sé que Tú obrarás todas las cosas para mi bien porque te amo! Tu gracia me basta, y tu poder se perfecciona en mi debilidad. Por eso, me jacto de esta prueba y de mi debilidad para que el poder de Cristo descanse sobre mí. Dios, después de mi sufrimiento, por favor restáurame y hazme fuerte, firme y firme. Sé que estos sufrimientos producirán perseverancia, carácter y esperanza. Porque estos problemas leves y momentáneos están logrando para mí una gloria eterna que los supera a todos. Entonces, en mis pruebas, Dios, ayúdame a fijar mis ojos no en lo que se ve, las cosas temporales que me agobian, sino en lo que no se ve, que es eterno. Te alabo porque me consuelas en mis problemas para que yo pueda consolar a otros con el mismo consuelo. Me deleitaré en la debilidad en las dificultades, en las dificultades, porque cuando soy débil, entonces soy fuerte. Señor, ayúdame a recordar que en todo, soy más que un vencedor por medio de Cristo, y por eso puedo acercarme a Tu trono de gracia con confianza. Amén