Siete Cualidades de un Inversionista Disciplinado
Cuando se trata de invertir, aprender qué
es lo que hay que hacer es relativamente fácil. Pero hacer lo que se supone que
debemos hacer es sorprendentemente difícil. Podemos ser nuestros peores
enemigos, especialmente cuando el mercado se vuelve inusualmente volátil, como
lo ha sido este año.
Una cualidad que separa a los mejores inversores
profesionales del resto puede tardar años en desarrollarse: el autocontrol
emocional. Nuestras emociones interactúan con las noticias y los eventos del
mercado de maneras que nos inclinan a actuar en los momentos equivocados. Todos
queremos «comprar barato y vender caro», pero emocionalmente es muy difícil
hacerlo.
Por ejemplo, pocos inversores están
dispuestos a «vender caro» cuando las valoraciones están aumentando. Nuestra
codicia natural tiende a aparecer, lo que hace que los inversores quieran aún
más. Tampoco es fácil «comprar barato». Los precios bajan porque la economía es
débil, las noticias son malas y la gente es pesimista o insegura. Bajo presión,
las emociones tienden a dictar nuestras acciones. En lugar de comprar, tendemos
a esperar hasta que la información parezca más positiva.
Incluso seguir una estrategia de inversión
sólida y basada en reglas requiere autodisciplina para superar las emociones y
confiar en el sistema. Aquí están siete sugerencias basadas en la Biblia acerca
de cómo crecer en esa área:
1. Se humilde. Acepta
que «… nada hay nuevo debajo del sol» [Eclesiastés 1:9 RVR], por
lo que las instrucciones que Dios nos ha dado en las Escrituras han demostrado
ser prácticas y efectivas. Las prioridades y directrices que nos ha
proporcionado son para nuestra protección. Abandonarlas significa que confiamos
en nuestro propio pensamiento más que en el de Él.
2. Se
consciente. Mírate a ti mismo como un cuidador de lo que Dios te ha dado.
Reconocer que tomar riesgos indebidos pone en peligro Su riqueza. Estarías
invirtiendo no solo para ti, sino también para aumentar los activos de manera
responsable para mantener a tu familia y dar más generosamente para ayudar a
difundir el mensaje de Jesús.
3. Mantente preparado. Desarrolla un plan por escrito que establezca tu estrategia de
inversión, reflejando tus objetivos personales y el nivel de riesgo deseado.
Comprendiendo cómo encajan tus inversiones y el papel que desempeña cada parte.
Entonces deja que la compra y venta sean dictadas únicamente por tu plan. Sé
proactivo, no reactivo.
4. Permanece contento. La preocupación por las grandes ganancias puede ser peligrosa. «Pero
los que viven con la ambición de hacerse ricos... quedan atrapados... Pues el
amor al dinero es la raíz de toda clase de mal; y algunas personas, en su
intenso deseo por el dinero, se han desviado de la fe verdadera y se han
causado muchas heridas dolorosas» [1 Timoteo 6:9-10 NTV]. Entonces, al
diseñar tu plan, ten ambiciones razonables. Se pierde más dinero debido a la
codicia que a cualquier otro factor.
5. Diversifica.
Asegúrate de que tu plan sea como lo enseña la Biblia, que dice: «Coloca tus
inversiones en varios lugares, porque no sabes qué riesgos podría haber más
adelante» [Eclesiastés 11:2 NTV]. Se pueden obtener mayores ganancias
concentrando tu dinero en una o dos inversiones importantes, pero también se
pueden incurrir en pérdidas asombrosas y repentinas.
6. Se paciente.
Sigue el ejemplo de la Parábola de los Talentos [ver Mateo 25:14-29], donde el
maestro estuvo ausente por «mucho tiempo». Haz de tu estrategia una a largo
plazo que aspire a acumular riqueza lentamente, asumiendo y las alzas las bajas
en los ciclos del mercado con calma. El tiempo es enemigo del especulador, pero
amigo del inversor.
7. Se responsable. Muéstrale el plan a tu cónyuge, y a un amigo de confianza que conozca
los principios de Dios, revísalo con ellos trimestralmente para ayudarte a
seguirlo fielmente. Cualquier intento de tomar medidas fuera de la estrategia
se verá atenuado cuando sabes que tendrás que rendir cuentas de manera honesta
a personas de confianza.
Austin Pryor – MANÁ DEL LUNES es una edición semanal de CBMC INTERNATIONAL
Comentarios
Publicar un comentario