ONU Aprueba Resolución Rechazando Reconocimiento de Jerusalén

Durante una sesión de emergencia de la Asamblea General de las Naciones Unidas el 21 de diciembre, una mayoría abrumadora de naciones aprobó una resolución no obligatoria en rechazo al reconocimiento por el Presidente estadounidense Donald Trump sobre Jerusalén como capital de Israel, declarándolo como “nulo e inválido.” Sin embargo, la Prensa Asociada señala que los 128 votos en contra de Trump fueron “significativamente menor” a los 150 votos que el presidente palestino Mahmoud Abbás y otros habían esperado.

De entre el total de 193 miembros estados, 128 naciones votaron a favor de la moción. Pero 9 naciones, específicamente Guatemala, Honduras, Israel, Islas Marshall, Micronesia, Nauru, Palao, Togo y Estados Unidos se opusieron a la resolución. Otras 35 naciones se abstuvieron, mientras que 21 naciones no votaron en lo absoluto.

Abbás rápidamente declaró el resultado como una “victoria para los palestinos.” Sin embargo, la Prensa Asociada opinó que los resultados realmente reflejan una “victoria” para la administración de Trump, quien había declarado previo a la asamblea que estaría velando y “tomando registro de nombres,” y que posiblemente haría un recorte de finanzas para las naciones que se opusieran a su reconocimiento de Jerusalén.

Aunque el texto de la resolución no mencionó a Estados Unidos por nombre, hizo una clara referencia al reconocimiento de Trump el 6 de diciembre de la Ciudad de Oro como la capital de la nación judía y su determinación de trasladar la embajada allí. El texto decía que “se lamentan profundamente por las recientes decisiones respecto al estatus de Jerusalén.”

La resolución también alegó que “cualesquiera decisiones y acciones que pudieran alterar el carácter, el estatus y la composición demográfica de la Ciudad Santa de Jerusalén no tienen efecto legal, son nulas e inválidas y deben ser revocadas.” La moción entonces pidió a todas las naciones estados que “refrenen de establecer misiones diplomáticas en la Ciudad Santa de Jerusalén.”

Turquía y Yemen pidieron la sesión de emergencia, con el respaldo de los países árabes y musulmanes y la Organización de Cooperación Islámica.

La reunión se realizó tres días después de que la administración de Trump vetara una resolución semejante entre el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas donde se exigía revocar el reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel. Aunque una mayoría de 14 de entre 15 miembros del Consejo de Seguridad aprobara la moción, el veto de EE.UU. impidió proseguir con la medida.

Ante el fracasado intento en el Consejo de Seguridad, las naciones árabes y musulmanas determinaron someter la resolución a la Asamblea General, donde ellos cuentan con una abrumadora mayoría automática. Sin embargo, a diferencia de las resoluciones aprobadas en el Consejo de Seguridad, las mociones aprobadas por la Asamblea General no tienen peso jurídico, y representan meros gestos simbólicos sin autoridad para efectuar cambios en lo práctico.

Antes del voto el 21 de diciembre, varios oficiales se dirigieron a la concurrencia. La embajadora estadounidense a la ONU Nikki Haley tomó el podio para hablar por parte de Estados Unidos y en defensa de Israel. Regañó al cuerpo mundial por su prejuicio anti-israelí, enfatizando que eso “socava la credibilidad de esta institución y, a la vez, es perjudicial al mundo entero. Israel debe protegerse por su propia sobrevivencia como nación, pero a la misma vez defiende los ideales de la libertad y dignidad humana, que debe ser lo que hace la Organización de las Naciones Unidas.”

Haley también señaló que EE.UU. tiene el derecho de localizar sus embajadas donde este desee, y que ha escogido a Jerusalén. América “pondrá su embajada en Jerusalén. Eso es lo que quiere el pueblo que hagamos, y eso es lo correcto. Ningún voto de las Naciones Unidas afectará eso. Pero este voto hará una diferencia en cómo los estadounidenses percibimos a las Naciones Unidas y cómo percibiremos a los países que nos falten el respecto en las Naciones Unidas. Y este voto será recordado.”

MOTIVO DE ORACIÓN: Ore para que los miembros estados no-musulmanes de las Naciones Unidas no se dejen engañar ni amedrentar por el gran número de naciones árabes y musulmanas que odian a Israel. Dele gracias a Dios por la fuerte voz de la embajadora Haley, y pida que Dios le continúe dando valentía para hablar en defensa de Israel.

VERSO BÍBLICO: “SEÑOR, guíame en Tu justicia por causa de mis enemigos; allana delante de mí Tu camino. Porque no hay sinceridad en lo que dicen; destrucción son sus entrañas, sepulcro abierto es su garganta; con su lengua hablan lisonjas. Tenlos por culpables, oh Dios; ¡Que caigan por sus mismas intrigas! Échalos fuera por la multitud de sus transgresiones, porque se rebelan contra Ti” (Salmo 5:8-10).

Traducido por Teri S. Riddering

Coordinadora PPP Centro de Recursos Hispanos