JIHAD EN FRANCIA: ES SÓLO EL PRINCIPIO

La demostración de "unidad" el domingo 11 de enero en Francia pudiera haber atraído a casi cuatro millones de manifestantes y dado la apariencia de unidad, pero tras esa fachada las tensiones van en aumento y se acercan al punto de ebullición. El 9 de enero, el presidente francés Francois Hollande insistió, contra toda evidencia, que "los que cometieron tales actos nada tienen que ver con el islam." Pero sería un grave error si viéramos la marcha como una movilización contra el terrorismo, la jihad y el antisemitismo.

Los líderes de organizaciones izquierdistas "anti-sionistas" que apoyan al grupo terrorista de Hamás estuvieron presentes. Ministros de naciones que financian el terrorismo jihadista, incluso el genocidio, también estuvieron presentes. El embajador de Arabia Saudita asistió poco después de que su nación azotara a Raif Badawi, un joven saudita acusado de "insultar al islam" con algunas sencillas críticas por Internet, y fue sentenciado a 1000 azotes en un año y 10 años de prisión. Turquía estuvo presente, que hospeda en su tierra parte del liderato de Hamás y ha encarcelado a más corresponsales que cualquier otro país. Mahmoud Abbás, el presidente del gobierno de unidad palestina junto con Hamás, se vio sonriente al frente de la marcha.

Benjamín Netanyahu, Primer Ministro de Israel, no fue invitado, pero éste asistió de cualquier manera. Oficiales franceses no le dieron la bienvenida y le dijeron que no hablara, pero habló de cualquier manera. Como señal de su desaprobación, oficiales franceses abandonaron un servicio en la Gran Sinagoga de París en memoria de los judíos fallecidos, antes del discurso de Netanyahu.

Habían rótulos por todas partes que decían "Yo soy Charlie" (nombre de la revista bajo ataque), y escasos carteles que decían "Yo soy judío" (por el negocio judío atacado). No se encontraba ni un solo cartel que mencionara la jihad o la necesidad de combatir el terrorismo o la jihad. Habían prohibido tal mención.

El Primer Ministro francés Manuel Valls dijo el 13 de enero: "Francia está en guerra contra el terrorismo, el jihadismo y el islam radical." Pero inmediatamente añadió que una de sus prioridades era luchar incesantemente contra la "Islamofobia."

Cualquiera que ve televisión y observa lo que ocurre en muchos países musulmanes tiene razón por dudar que el islam sea realmente pacífico. La mayoría de los "expertos" musulmanes invitados a hablar conocen muy bien al islam, están familiarizados con el Internet y con lo que ocurre en muchos países musulmanes, pero ellos mienten. Casi todos los que lo defienden son militantes, imanes o eruditos musulmanes. La mayoría pertenece a organizaciones islámicas. Muchos pertenecen a la Hermandad Musulmana en Francia, y los franceses le han cedido el estrado de manera casi obligatoria.

El concepto de que los musulmanes deban integrarse ha sido discutido largamente, pero en vano. La falta de integración ha aumentado década tras década. Los supuestos "expertos" que hablaban sobre la integración también se vieron forzados a mentir. Mantuvieron lejos a los que saben la verdad y la podrían proclamar.

Existen sobre 750 lugares en Francia donde los no-musulmanes no van, todos controlados por gangas e imanes radicales. Más del 60% de los confinados en prisiones francesas son musulmanes. Expertos en terrorismo dicen que docenas de jihadistas actualmente preparan ataques en Francia, y que muchos más se perpetrarán.

Los judíos franceses no tienen ilusiones. Ataques antisemitas son ya muy comunes y cada día más severos. Cuando miembros del gobierno se atreven hablar contra el antisemitismo, rehúsan mencionar que es por causa del islam, aunque el antisemitismo islámico es la causa principal del antisemitismo.

Ellos saben que si sólo se hubiese atacado a judíos en enero, no se hubiese realizado una protesta. Cada año, más judíos se van de Francia. Siete mil se fueron para Israel en 2014, y la Agencia Judía de inmigración a Israel espera como 15,000 este año.

Los que hablan oficialmente en nombre de la comunidad musulmana francesa explica que el islam no es la amenaza, sino que los culpables son los que "insultan al islam," y que las "principales víctimas" son los musulmanes.

El resto de la población francesa no está convencida. Varias encuestas demuestran que el 70% de los franceses piensan que el islam es incompatible con la democracia y la civilización occidental, encuestas que se hicieron antes de los recientes ataques.

El reportero francés Eric Zemmour dijo hace poco que Francia estaba en el borde de una guerra civil. Sus comentarios provocaron escándalo. Recibió muchas amenazas de muerte, y ahora está bajo protección policial. Todos los que critican el islam en Francia sufren igualmente.

La situación en Bélgica es tan mala como en Francia. Informan que también hay muchas células terroristas en Alemania y Holanda. La jihad en Europa está sólo en sus comienzos.

MOTIVO DE ORACIÓN: Ore para que otras naciones en Europa vean lo que ocurre en Francia y otros lugares, y traten de evitar que los extremistas musulmanes arrebaten el poder, y ore para que declaren la verdad sobre dicho peligro a su comunidad.

VERSO BÍBLICO: "Con arrogancia el impío acosa al afligido; ¡que sea atrapado en las trampas que ha preparado! ...Oh SEÑOR, Tú has oído el deseo de los humildes; Tú fortalecerás su corazón e inclinarás Tu oído para hacer justicia al huérfano y al afligido; para que no vuelva a causar terror el hombre que es de la tierra" (Salmo 10:2,17-18). 

(Porciones de un artículo por Guy Milliere, 

The Gatestone Institute, 19 de enero de 2015)