LA GUERRA DE ISRAEL POR LA VERDAD



Desde que Israel resurgió como nación en 1948, ha sufrido oposición en casi todas las esferas posibles. Ha sido repetidamente atacado en el ámbito militar por sus vecinos hostiles, en el ámbito de las relaciones públicas por los medios noticiosos globales, en el ámbito político por las Naciones Unidas, en el ámbito religioso por los teólogos cristianos del "Reemplazo" y hasta en el ámbito diplomático por los países que alegan ser sus aliados. En años recientes, sin embargo, ha surgido un inesperado apoyo por Israel, creando un nuevo y poderoso amigo en los cristianos evangélicos conservadores. Desde todas partes del mundo, muchos creyentes, quizás como usted y como yo, se enorgullecen de llamarse "sionistas cristianos" y han determinado usar su poder político, financiero y espiritual para ayudar a Israel enfrentar cualquier ataque que venga en su contra.

Ese apoyo está arraigado en las Escrituras. Un creciente número de cristianos que creen literalmente en la Palabra de Dios ven en sus páginas el mandato de amar a esa nación y pueblo con la misma pasión que expresa Dios. Para sorpresa de nadie, a medida que surgen nuevos aliados, surge un nuevo ataque. Se podría describir ese ataque como uno teológico, aunque toma muchas formas en lo práctico. Su arma principal es el mismo Libro que comparten los judíos y los cristianos.


La Biblia es nuestra Única Protección:


La Biblia es la infalible e inerrante Palabra del Creador del universo, dada para dirigir nuestro camino en esta vida. Allí, Dios revela Su carácter al ser humano y esboza Sus planes respecto al mundo de principio a fin. Habla sobre Su omnipotencia, Su omnisciencia, Su fidelidad a Su pacto y Su abundante amor hacia la creación. Claramente define el bien y el mal, y describe las consecuencias de cada opción. Habla sobre Su deseo de que todos los hombres entren a una relación con Él, y narra la historia de una tierra y un pueblo que son centrales en Su plan para redimir al mundo. No es un libro; es el Libro, y sin esa verdad revelada, el ser humano no tiene escudo contra el engaño que le conduce a la destrucción.

Tristemente, sin embargo, casi nadie lee ese Libro hoy día. Hace poco me enteré de un estudio realizado por una compañía investigadora de buena reputación en Estados Unidos respecto a cristianos y sus creencias sobre la Biblia. Me sorprendí al saber que sobre el 60% de los que se denominaban "creyentes," incluyendo los "nacidos de nuevo," no podían mencionar el nombre de los cuatro Evangelios, no podían mencionar cinco de los Diez Mandamientos, no creían en la infalibilidad de la Biblia y tomaban decisiones morales basadas en sus propias opiniones en lugar de la verdad bíblica. Otro estudio encontró que menos del 50% de los profesantes cristianos leían la Biblia cada día. Lamentablemente, la situación es así de mala en muchas otras naciones del mundo.

Los efectos de esa falta en fundamento bíblico se puede ver en casi todas las áreas de nuestra sociedad cristiana, desde su decadencia moral hasta la desintegración familiar, desde la alta incidencia en criminalidad hasta el temor en que vive cada cual. Pero en ningún otro momento se observa más que cuando surge el tema de Israel. Dios describe a esa nación como la niña de Su ojo, pero muy pocos cristianos toman eso en cuenta para basar sus opiniones. Escuchan las críticas de otras personas, y los cristianos que carecen de solidez bíblica son afectados por cualquier viento de falsa doctrina antisemita.


Herejía Antigua en un Vestido Nuevo:


Eso ha venido sucediendo desde el tercer siglo a.C., cuando la Teología del Reemplazo echó raíz dentro de la Iglesia. Los líderes difundieron la falsa creencia de que Dios se había lavado las manos del pueblo judío, reemplazándolo con los cristianos, quienes ahora eran los escogidos de Dios para recibir las bendiciones del Libro. Sin embargo, creían que los judíos todavía recibirían las maldiciones del Libro. Por casi dos milenios, cristianos bíblicamente desnutridos creían que Dios había abandonado Su pacto con Israel y renegado al pueblo judío. Trágicamente para ambos pueblos, la Teología del Reemplazo se hizo normativa para la relación entre la Iglesia e Israel, produciendo casi dos milenios de antisemitismo cristiano.

En la actualidad, la Teología del Reemplazo es ahora enseñada con un nuevo elemento teológico en contra de Israel. Un movimiento religioso con enormes ramificaciones ha tomado el centro del escenario cristiano, y es la Teología del Cumplimiento Palestino, también conocida como el "Palestinismo Cristiano." Eso ha sucedido sólo porque los cristianos no leen sus Biblias e ignoran la verdad de la Palabra.

Paul Wilkinson, en su libro For Zion’s Sake [Por el Bien de Sión], creó ese término de "Palestinismo Cristiano," y lo define como lo contrario al Sionismo Cristiano. Mientras muchos evangélicos ven la Biblia como un libro totalmente judío, ese movimiento lo ve como un documento totalmente cristiano. Creen que el Nuevo Testamento reemplaza o suplanta el Antiguo en relevancia y autenticidad, y que la Iglesia se ha convertido en el nuevo Israel. Más aún, creen que la Iglesia ni siquiera es un pueblo nuevo de entre los gentiles ni que ha sido injertado en el olivo, sino que es el verdadero Israel. Enseñan que la Tierra de la Biblia no es Israel, sino Palestina, y que el Holocausto debe ser rechazado y nunca recordado.

Aunque los Sionistas Cristianos reconocen el 14 de mayo de 1948 como un milagro de Dios, los "Palestinistas Cristianos" lo ve como una catástrofe, que la nación de Israel no es algo profético, sino totalmente ilegítimo. Enseñan que los judíos israelíes no han sido llamados a regresar a su tierra ancestral por el Señor, sino que son ocupadores ilegales que han construido un imperio militar en tierra ajena. Sobre todo, su idea es que Jesús nunca fue judío, sino palestino.


Creando un Nuevo Jesús:


El reconocido padre de dicho movimiento es un clero anglicano nacido en Nazaret llamado Naim Ateek (pronunciado Atik). Ese árabe ha renovado la Teología de la Liberación católica de la década de los 70 para crear un movimiento que alega que Jesús fue un libertador social, "un palestino que sufrió bajo la ocupación militar en la tierra de Palestina."

En un mensaje de Cuaresma en 2001, dijo lo siguiente:

Aquí en Palestina, Jesús nuevamente camina por la Vía Dolorosa. Jesús es un débil palestino humillado por los puestos de control, una mujer que trata de llegar al hospital, un joven cuya dignidad es atropellada, un estudiante que no puede llegar a la universidad para estudiar y un padre que necesita hallar pan para alimentar a su familia. En este tiempo de Cuaresma, nos parece a muchos que Jesús está nuevamente clavado en la cruz, rodeado de miles de palestinos crucificados. Sólo requiere de visión espiritual para ver las miles de cruces por toda la tierra en que hombres, mujeres y niños palestinos son crucificados; Palestina se ha convertido en una enorme Gólgota. El sistema de crucifixión del gobierno israelí opera diariamente…Palestina se ha convertido en el lugar de la calavera.

Lamentablemente, el esfuerzo de Ateek por ilegitimar la nación de Israel y su reclamo bíblico a la tierra con un Jesús palestino ha alcanzado mucho éxito. Este nuevo Jesús ha sido aceptado por los "palestinistas cristianos," y es una poderosa herramienta propagandista en su cruzada anti-israelí. Con alarmante regularidad, tales referencias se hacen desde el púlpito alrededor del mundo, frecuentemente conduciendo la audiencia hacia la lógica conclusión: si Jesús fue un palestino perseguido, debe también simpatizar con los palestinos perseguidos. El evangelista internacional Carl Medearis pregunta: "¿Cómo votaría Jesús si tuviera un asiento en las Naciones Unidas?" Su respuesta es: "Jesús apoyaría la petición por nacionalidad palestina."

Aunque la idea de que Jesús no fue judío sino palestino es central en este movimiento, no son los únicos en creer así. El mundo musulmán también se dedica al revisionismo histórico, y cada vez más líderes y maestros islámicos hacen esa misma alegación. Un clero musulmán declaró por la televisión palestina: "Jesús fue un palestino y nadie lo niega. Fue el primer shahid [mártir]." Otro se refirió a Jesús como "un palestino, torturado en su propia tierra." Otro más dijo: "Jesús nació en esta tierra [Palestina], creció en esta tierra, difundió sus enseñanzas en esta tierra; él y su madre María eran palestinos por excelencia."


Eliminando el Sionismo de la Biblia:


Otra alegación de los "palestinistas cristianos" es que cualquier referencia al judaísmo de Jesús roba la universalidad del Evangelio. Dicen que es un mensaje para todos los hombres de todos los tiempos, y que el hacer referencia a Jesús como judío crea una inaceptable exclusividad. Más aún, los proponentes rechazan cualquier referencia a Israel como una nación destinada para un futuro glorioso. Colin Chapman, en su libro titulado Whose Promised Land [Tierra Prometida de Quién], reta el concepto de un Jesús judío, además del concepto de "perpetuidad" en cuanto al pacto de Dios con Israel y su posesión de la tierra. Dice: "Los autores del Nuevo Testamento dejaron de mirar hacia el cumplimiento de las profecías del Antiguo Testamento respecto al retorno a la tierra y una restauración de la nación judía. El único cumplimiento de todas las promesas y profecías ya estaba presente ante sus ojos en la persona de Jesús."

Además, cuando la Biblia hace evidente defensa de Israel, la acusan de exclusividad. Naim Ateek critica textos como en Isaías 61, que habla del día en que los gentiles servirán a Israel cuando sea nuevamente levantada como nación santa de Dios y el gozo de toda la tierra. Su respuesta es: "Ese texto es inaceptable hoy día… ese sionismo debe ser eliminado."


Una Casa Dividida:


Desafortunadamente, muchos líderes evangélicos de renombre no tan solo creen en el "Palestinismo Cristiano," sino que activamente lo promueven, aprovechando su influencia para llevar ese mensaje anti-bíblico a las masas cristianas alrededor del mundo. Tony Campolo, John Piper, Stephen Sizer, Hank Hanegraaff, Lynn Heibels y Gary Burge son algunos maestros y líderes que endosan ese movimiento. A través de sus púlpitos y sus recursos, no sólo pintan a Israel como malvado, sino que proclaman un mensaje anti-sionista, alegando que los cristianos que apoyan a Israel son una amenaza al Evangelio y culpables de apostasía.

Stephen Sizer, en su libro Christian Zionism: Roadmap to Armageddon [Sionismo Cristiano: Mapa de la Ruta al Armagedón], describe el sionismo cristiano como "una amenaza totalmente anti-bíblica" y como "uno de los movimientos más peligrosos y heréticos en el mundo." Echa la culpa a los sionistas cristianos por exacerbar el conflicto árabe-israelí. Hank Hanegraaff escribe: "Las creencias y la conducta de los sionistas cristianos son el antítesis del cristianismo bíblico." Y el líder de la Iglesia Emergente Brian McLaren escribe contra "las terribles, mortales y distorsionadas, aunque populares, teologías asociadas al sionismo cristiano…"


Una Batalla, Muchos Frentes:


Uno no puede evitar preocuparse por tan agresiva campaña que logra cada vez más influencia política y apoyo entre líderes evangélicos, denominaciones y grupos para-eclesiásticos mundialmente. Usan efectivamente armas como conferencias, videos, material impreso e Internet en su batalla para alejar los corazones y las mentes de los cristianos de la verdad de Dios y Sus pactos respecto a la nación y el pueblo de Israel. A continuación hay cinco ejemplos del creciente arsenal en esa guerra muy real.

1. Conferencia Cristo en el Puesto de Control:

Una tercera conferencia anual de este tipo fue realizada en marzo de 2012 en Belén, evento promocionado como un foro abierto para procurar ideas en común que promuevan la paz en el Medio Oriente. Sin embargo, la verdadera intención de esa reunión fue condenar a Israel, además de negar su derecho a existir y su legítimo reclamo a la tierra. Los conferenciantes incluyeron a Stephen Sizer y Gary Burge, y previo a celebrar la conferencia, su sitio de Internet estaba repleto de retórica anti-israelí y también contra los sionistas cristianos.

2. Documento Kairos Palestina:

A finales de 2009, varios líderes cristianos palestinos publicaron un documento llamado Kairos Palestine Document [Documento Palestino Kairos] supuestamente en bien de la paz. Este escrito echa la culpa del conflicto árabe-israelí totalmente a Israel, e intenta justificar la política palestina de violencia y terrorismo como una reacción legítima a lo que denominan como "la ocupación." Urge a los cristianos para que regresen a la "Teología del Reemplazo," y niega la legitimidad del judaísmo y la existencia de los judíos.

El documento ha sido traducido a muchos idiomas y llega a todas partes del mundo, recibiendo apoyo por parte de muchos cristianos. Crearon una guía de estudio en 2011 para que iglesias, clases bíblicas y grupos de estudio pudieran comprender la "importancia" de este documento.

3. El Llamado de Belén:

Esta es una publicación creada en 2011 por los participantes de la Conferencia para Justicia Global Kairos en Belén, y claramente establece que es positivo y necesario atacar la legitimidad de Israel para poder alcanzar la paz en el Medio Oriente. Se refiere a Israel como un régimen ilegal culpable de perpetrar injusticia y brutalidad sistemática contra el pueblo palestino. Constantemente se refiere a la "ocupación" de Israel en la tierra, la que describe como un crimen y un pecado. El documento declara que los firmantes rechazan cualquier teología que justifique la posición actual de Israel y exigen el derecho del retorno de los palestinos, entre otras cosas.

4. Con Dios de Nuestro Lado:

En 2012, Porter Speakman Jr. produjo este documental basado en los trabajos de Stephen Sizer. La película alega ser una nueva perspectiva sobre el conflicto árabe-israelí que promueve el inclusivismo y una supuesta justa paz con amor hacia tanto los judíos como los palestinos.

En realidad, es una película propagandista profesional que denuncia al sionismo cristiano, critica a Israel y pinta a los que toman las promesas de Dios literalmente como fanáticos insofisticados. Ha sido vista en muchas iglesias e instituciones académicas por todo Estados Unidos, Canadá e Inglaterra, a menudo acompañado por Speakman y Sizer.

5. Boicots, Distanciamiento y Sanciones

Finalmente, el movimiento de boicots, distanciamiento y sanciones (Boycott, Divestment and Sanctions, o BDS) se autodefine como una campaña global contra Israel, esfuerzo que procura el sometimiento de Israel a la Ley Internacional en defensa de los derechos palestinos. En su sitio Web, acusa a Israel de lavado étnico, colonización, discrimen racial y ocupación militar. Exige el fin de la "ocupación" y la "colonización" de tierras árabes, el desmantelamiento del cerco de seguridad y el derecho del retorno de los palestinos.

Este movimiento promueve los boicots contra productos y compañías israelíes, incluyendo instituciones educativas, agrícolas, cosméticas, etc., quienes alegadamente obtienen ventaja financiera a consecuencia de la violación de los derechos palestinos. Realiza actividades para que agencias y organizaciones se distancien de corporaciones a las que acusan de ser cómplices en la violación de los derechos palestinos, e intenta asegurar que las inversiones y los fondos pensionarios no provean financiamiento a tales compañías. Sus sanciones son esenciales para demostrar su desaprobación hacia las actividades "criminales" de Israel. El movimiento también hace campañas exigiendo sanciones contra Israel, educa a la sociedad sobre las alegadas violaciones israelíes de la ley internacional, y procura remover el "enchapado inmerecido de respetabilidad" israelí.

Aunque el movimiento BDS no es teológico en sí, los conceptos que presenta tienen fuerte atractivo y han logrado popularidad entre algunos grupos cristianos. A diferencia de los demás ejemplos cristianos previos, este movimiento representa una alianza no muy santa entre muchas iglesias y denominaciones cristianas mundiales, corporaciones e instituciones internacionales, 171 Organizaciones No-Gubernamentales (NGO), uniones laborales y partidos políticos.


Respuesta Cristiana:


Estos más recientes ataques contra Israel tienen enormes ramificaciones para la Iglesia. En mis viajes internacionales, he encontrado que muchos cristianos están confundidos con los argumentos propuestos por los "palestinistas cristianos." Algunos han cuestionado la Teología del Reemplazo y su fachada seudo-bíblica, pero no están seguros, y otros están enojados porque reconocen que esos movimientos son una nueva cruzada religiosa con el viejo odio irracional hacia el pueblo judío que todos los demás movimientos antisemitas.

Esta vez, no obstante, no sólo atacan a Israel sino que también atacan a los creyentes quienes apoyan a Israel. De esa manera, los proponentes de esos movimientos atacan el carácter mismo del Dios de Israel y la veracidad de Su Palabra. ¿Y cómo debe usted responder?

1. Conozca Su Biblia:

La medida más importante para contrarrestar ese tipo de ataque es que los cristianos sean fieles estudiantes e intérpretes de la Biblia. Debemos volver a elevar la Biblia como la Palabra inerrante e infalible de Dios como la única fuente de verdad.

Cuando usted sea confrontado por alguien de esa teología, que defienda el personalismo y el revisionismo histórico como método interpretativo, es esencial que usted ofrezca una cuidadosa respuesta bíblica. Naim Ateek ha dicho: "Cuando uno es confrontado con un pasaje bíblico difícil de entender…debe hacerse una simple pregunta como: ¿Ese pasaje está de acuerdo con la manera en que he conocido a Dios en Cristo? ¿Cuadra con mi concepto de Dios según me lo ha revelado Jesús?… Si cuadra, entonces ese pasaje es válido y autoritativo. Si no, entonces no puedo aceptar su validez ni autoridad."

Una perspectiva tan baja de la autoridad escrituraria amerita una respuesta firmemente arraigada en las mismas Escrituras. Memorice y medite en versos como los siguientes, y no permita que su confianza en la fidelidad de Dios sea sacudida con esa nueva "hermenéutica."

"Haré de ti una nación grande, y te bendeciré, engrandeceré tu nombre, y serás bendición. Bendeciré a los que te bendigan, y al que te maldiga, maldeciré. En ti serán benditas todas las familias de la tierra" (Gén. 12:2-3).

"Entonces el SEÑOR tu Dios te hará volver de tu cautividad, y tendrá compasión de ti y te recogerá de nuevo de entre todos los pueblos adonde el SEÑOR tu Dios te haya dispersado. Si tus desterrados están en los confines de la tierra, de allí el SEÑOR tu Dios te recogerá y de allí te hará volver. Y el SEÑOR tu Dios te llevará a la tierra que tus padres poseyeron, y tú la poseerás; y El te prosperará y te multiplicará más que a tus padres" (Deut. 30:3-5).

"Te levantarás y tendrás compasión de Sion, porque es tiempo de apiadarse de ella, pues ha llegado la hora. Ciertamente Tus siervos se deleitan en sus piedras, y se apiadan de su polvo. Las naciones temerán el nombre del SEÑOR, y todos los reyes de la tierra, Su gloria. Porque el SEÑOR ha edificado a Sion, y se ha manifestado en Su gloria" (Salmos 102:13-16).
"'Restauraré el bienestar (haré volver a los desterrados) de Mi pueblo Israel, y ellos reedificarán las ciudades asoladas y habitarán en ellas; también plantarán viñas y beberán su vino, y cultivarán huertos y comerán sus frutos. Los plantaré en su tierra, y no serán arrancados jamás de la tierra que les he dado,' dice el SEÑOR tu Dios" (Amós 9:14-15).

Otros libros y pasajes importantes incluyen: Jeremías 31:35-40; Ezequiel 36 y 37; Joel 3:1-2; Abdías, Sofonías, Zacarías, Hechos 15:13-16 y Romanos 9:1-11.

2. Conozca a su Enemigo:

Es críticamente importante reconocer que el defender a Israel es defender a Dios. También es cierto lo contrario, que el atacar a Israel es atacar a Dios. Desafortunadamente, las personas que se involucran en esos movimientos colaboran con un Enemigo muy real que procura desacreditar a Dios al declarar que Dios no es fiel a Sus pactos. Pero tales individuos no son el enemigo, sino que deben tratarse con el mismo amor y respeto compasivo que cristianos deben evidenciar hacia todos los seres humanos.

3. Hable la verdad en amor:

Muchos cristianos que apoyan a Israel son muy apasionados en su defensa. Aman a Israel porque creen que es un mandato de Dios y, por lo tanto, son muy firmes y abiertos cuando alguien ataca o amenaza a Israel. Es importante confrontar las mentiras con la verdad y asegurar que se escuche una perspectiva verdaderamente bíblica. Pero a menudo, la pasión no es un buen amigo. Una mejor defensa de la verdad se hace de manera calmada y libre de pasión, con un variado uso de datos y versos bíblicos.

4. Ore:

No hay arma más poderosa que la oración. Debemos recordar que ésta es una guerra espiritual, y debe pelearse en ese  nivel.

  • Ore a menudo y con regularidad por Israel, recordándole a Dios los pactos y las promesas que ha hecho con la Tierra y el pueblo de Israel, y proclamando su pronto cumplimiento.
  • Ore para que la Iglesia mundialmente reconozca y absorba el corazón de Dios hacia Su pueblo escogido, que se arrepienta de las herejías de la Teología del Reemplazo y del antisemitismo cristiano.
  • Ore para que la Biblia nuevamente sea leída, estudiada y valorada como el texto sagrado que es, y para que proteja a los creyentes del engaño.
  • Ore para que el Señor claramente revele Su verdad a los que están involucrados en el movimiento "palestinista cristiano," y que restaure la unidad en Su Iglesia.
  • Ore para que las relaciones de amor y confianza que se han ido desarrollando entre judíos y cristianos evangélicos puedan sobrevivir cualquier ataque, y que crezcan aún más firmes, para la honra y gloria del nombre de Dios.

Por Cheryl Hauer,
Directora de Desarrollo Internacional

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